La derrota frente a Defensores de Belgrano significó mucho más que un nuevo traspié para Colón en la Primera Nacional. El Sabalero quedó matemáticamente fuera de la carrera por el Reducido y, cuando restan cinco fechas, su único objetivo es evitar el descenso en una temporada que se transformó en una pesadilla.

Hoy el equipo de Ezequiel Medrán ocupa el puesto 15 en la Zona B con 28 puntos, apenas por encima de Almirante Brown (26), CADU (19) y Talleres de Remedios de Escalada (17). Es decir, le saca nueve unidades de ventaja a Talleres, último en la tabla y en zona de pérdida de categoría, con 15 puntos todavía en disputa.

La pelea es directa y los cruces serán determinantes: Colón debe visitar a Talleres en Remedios de Escalada y, en la última fecha, recibirá a CADU en Santa Fe. En el medio, enfrentará a Estudiantes de Río Cuarto, Deportivo Morón y Estudiantes de Buenos Aires.

El panorama está lejos de lo esperado a principio de año, cuando el rojinegro se perfilaba como candidato al ascenso. Con 17 derrotas en 29 partidos, seis encuentros sin ganar y apenas 21 goles a favor (uno de los peores registros de la categoría), la misión cambió: ahora la urgencia es sostener la categoría.

Reducido por el segundo ascenso – Descenso: último puesto

De aquí al cierre, Colón jugará con el corazón en la boca. El margen de error es mínimo y cada fecha puede definir su destino: la permanencia o la caída a la Primera B Metropolitana, un golpe que sería histórico.